PREVENCIÓN

Prevención

La prevención de la salud está relacionada directamente con las acciones que se llevan a cabo para evitar las enfermedades. Son medidas que, en todo momento, se adoptan para impedir la aparición de una enfermedad.

Clásicamente se distinguen tres niveles de prevención, según el momento de la historia natural de la enfermedad en el que se realizan las actividades preventivas.

1. PREVENCIÓN PRIMARIA

Cuando se realizan en personas sanas y pretenden evitar la aparición de la enfermedad. Ejemplos de ellas son las inmunizaciones del calendario vacunal o el control de factores de riesgo cardiovascular como el tabaquismo, la dislipemia o la hipertensión arterial en personas sanas, etc.

2. PREVENCION SECUNDARIA

Cuando las actividades se realizan una vez existe la enfermedad, pero todavía no tiene manifestaciones clínicas, y consisten en la detección, diagnóstico y el tratamiento precoz de la misma con fines curativos. Es la única prevención posible para aquellas enfermedades cuyos factores de riesgo se desconocen. Ejemplos de actividades de prevención secundaria son el cribado del cáncer de mama y de cuello uterino, el cribado de la fenilcetonuria, etc.

3. PREVENCIÓN TERCIARIA
Por último, cuando las actividades de prevención se realizan cuando la enfermedad presenta manifestaciones clínicas y su objetivo es paliar las consecuencias de la enfermedad. Ejemplos de ello es la rehabilitación pos-infarto agudo de miocardio o pos-ictus, el entrenamiento y educación de los niños con síndrome de Down, etc.

Algunos autores han acuñado más recientemente el término prevención primordial. Con él hacen referencia a las actividades de prevención o evitación de las causas o factores de riesgo de las enfermedades. Ejemplos de este tipo de prevención son la educación alimentaria de los niños para evitar el desarrollo de la colesterolemia y la obesidad en la edad adulta, o la prohibición de la venta de tabaco a menores de 16 años para evitar que se conviertan en fumadores.