Una alimentación saludable es la base de una vida sana. Existe una relación directa entre el tipo de alimentación y ciertas enfermedades muy comunes, como por ejemplo las enfermedades cardiovasculares (angina de pecho, infarto de miocardio, accidente cerebrovascular, hipertensión arterial), la obesidad, la diabetes mellitus y también muchos problemas del aparato digestivo como el estreñimiento.
Toda alimentación equilibrada debe ser siempre completa e incorporar los siete nutrientes esenciales: proteínas (principalmente vegetales), grasas, hidratos de carbono, fibra, agua, vitaminas y minerales.
Consejos generales:
• Usa aceite de oliva. No tomes muchas grasas, sobre todo de origen animal.
• Consume pan integral y legumbres para aportar suficiente fibra dietética.
• El pescado es preferible a la carne.
• Es mas sano cocinar los alimentos hervidos, a la plancha o al horno que fritos.
• No te excedas en el consumo de azúcar.
• Consume los alimentos cocinados con poca sal.
• Si tomas bebidas alcohólicas, debes hacerlo de manera sensata y con moderación. Como consumo moderado se entiende no beber mas de 1 o 2 copas por día.
• Para asegurar un correcto aporte de calcio consuma leche o derivados lácteos diariamente.